Otro adiós - (Acabemos con el patrimonio)
El pasado día 18, miembros del Foro Ciudadano y de la plataforma Mazarrón no Se Vende presentaron el siguiente escrito ante Dirección General de Cultura, Consejería de Educación y Cultura de la Región de Murcia:
En sesión ordinaria nº 5 celebrada por el Ayuntamiento de Mazarrón el día 28 de marzo de 2006, el pleno acordó por UNANIMIDAD negociar la adquisición por parte del Ayuntamiento de un inmueble centenario situado en la Avenida de la Constitución -conocida por los vecinos como Casa de Salvador Martínez Saura- por el valor histórico-artístico de este inmueble que ya forma parte del paisaje urbano de Mazarrón.
En noticia de prensa aparecida en el diario la Opinión de la Región de Murcia el 30 de abril de 2006 así se acredita lo expuesto anteriormente. Como muestra el titular de encabezamiento: “La casa de Martínez Saura será restaurada”.
Sorprendentemente la comisión de gobierno del Ayuntamiento de Mazarrón, celebrada el viernes 12 de mayo de 2006, aprobó la demolición de este inmueble por parte de una empresa constructora.
El martes 16 de mayo de 2006 han comenzado a desmontar marcos de ventanas y puertas, lo cual indica su inminente demolición.
El que este bien inmueble no haya sido nunca declarado Bien de Interés Cultural no es porque no merezca tal reconocimiento sino porque, al igual que ocurre con muchos otros en el municipio de Mazarrón, nadie lo ha solicitado. No obstante, en base a los artículos 25 y 37.2 de la ley 16/1985del 25 de junio de 1985, del Patrimonio Histórico Español, pedimos se paralice la demolición de este inmueble que consideramos digno de proteger. Así mismo nos apoyamos sobre el artículo 46 de la Constitución española el cual dice así: “los poderes públicos garantizarán la conservación y promoverán el enriquecimiento del patrimonio histórico, cultural y artístico de los pueblos de España y de los bienes que lo integran, cualquiera que sea su régimen jurídico y su titularidad. La ley penal sancionará los atentados contra ese patrimonio”.
Pocos días después comenzaron a quitar los marcos de las ventanas y las puertas y terminaron con el derribo de una de las pocas casas, patrimonio de nuestro pueblo, que quedaban en pie.
La cosa se enreda aún más si tenemos en cuenta que el Ayuntamiento había comprado el almacén situado junto a esta casa con la intención de restaurarlo y utilizarlo como museo minero u otro local social. La casa de los Martínez junto a este local habrían salvado sin duda dos de las pocas joyas que nos quedan. Pero no fue así…
Y no sólo eso: Vicamugra (empresa que compró la casa para construir más casas de esas que hipotecan la vida de sus compradores) pagó 400 millones de las antiguas pesetas mientras que el Ayuntamiento había ofrecido a sus propietarios 600 (ver la publicación Mazarrón Día a Día en papel). Por alguna razón, el Ayuntamiento se retiró del cuadrilátero y dejó vía libre a Vicamugra, que batió todos los récords habídos y por haber en derribar una construcción que había sido testigo de nuestra historia durante décadas.
A pesar de que ya no hay vuelta atrás, algunos mazarroneros han comenzado a recoger firmas para que el Ayuntamiento adquiera el solar y lo destine al disfrute de todos. Muchos se preguntarán ¿para qué? Pues para que los 21 concejales cumplan al menos la mitad de lo que acordaron por unanimidad y para que este Pueblo, del que están desapareciendo todos sus signos de identidad y que ni siquiera cuenta con un teatro, tenga algo. Desde aquí, mi adiós a la Casa de Salvador Martínez Saura, otra víctima del malhacer de algunos y de la pasividad de muchos.